Cinco personajes inocentes son víctimas del manejo político logrado por las corporaciones mediáticas sobre el tema de la inseguridad, que al instalar comunicacionalmente la idea de un incremento desmedido en hechos delictivos suscita en distintos sectores de la sociedad, una paranoia que lleva a la injustificada y absurda necesidad de armarse.
La actriz Paula Rubinsztein debuta como directora con esta propuesta que actualiza Monos con Navaja de Luis Saez estrenada en el año 2001. Con recursos del humor, comicidad de personajes y un lenguaje duro, Paula Rubinsztein logró crear un hecho teatral que le permite al espectador sonreír, pero a la vez reflexionar a pesar de ser testigo de una situación dramática.
Con la actuación de Oscar Romeo, Nicolás Besasso, Claudio Rama, Daniel Porcellana y Paula Rossi, escenografía de Daniela Draye y en la asistencia de dirección de Martín Dimarco.
Monos con Navaja
Funciones: Vienes 21hs Julio 2012
Teatro: La Ranchería (México 1152 Cdad de Bs As)
Informes y reservas: 4382-5862
Entrada General: $40 - Desc.20% a jubilados y estudiantes
Sinopsis
La acción transcurre en una panadería de barrio a la cual ingresa un cliente de clase media en actitud sospechosa. El dueño de la panadería y sus hijos, que ya han sido asaltados en varias oportunidades y están sugestionados por la inseguridad de la que creen ser víctimas nuevamente, deciden defenderse amenazando al cliente con un arma; y tomándolo como sospechoso lo someten a un violento interrogatorio.
En el ínterin, la esposa del cliente lo llama por teléfono para ubicarlo dado su tardanza y decide ir a buscarlo intuyendo que está en peligro. La mujer armada y también influenciada por lo que “ha escuchado” en reiteradas ocasiones en los medios, irrumpe en la panadería y despliega todas sus habilidades aprendidas en la televisión para defenderse y así poder “salvar” a su marido.
Las circunstancias desencadenan escaramuzas entre los protagonistas donde la discriminación, la paranoia y las diferencias socioeconómicas se ponen de manifiesto. Finalmente interviene la policía que -lejos de establecer un orden que permita aclarar la situación-, convierte en una tragedia aquello que tan sólo fue un gran mal entendido.
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