Crítica: Escenas de la vida conyugal

Escenas de la vida conyugal es del autor Ingmar Bergman; primero fue una miniserie sueca estrenada en 1973; luego se transformó en película con su título original en sueco Scener ur ett äktenskap y finalmente se dio forma a la versión teatral. En nuestro país fue estrenada en 1994 y estuvo protagonizada por Norma Aleandro y Alfredo Alcón. En esta oportunidad Norma Aleandro tiene a su cargo la dirección del espectáculo y, esta nueva versión, está protagonizada por Ricardo Darín y Valeria Bertuccelli.

Juan y Mariana, los protagonistas de esta historia, comparten con el público diferentes momentos y fragmentos de su matrimonio, exponen la relación entre ellos y dejan al descubierto tanto su amor como sus crisis.

Las actuaciones de Darín y Vertuccelli son formidables. Fluctúan con extrema naturalidad de la comedia al drama. Crean personajes a los cuales comprendés, cuestionás y hasta odiás en cada una de las escenas. Escenas de la vida conyugal es una obra con un gran texto que refleja la vida misma, y hay que mirarla teniendo en cuenta la famosa premisa: cada pareja es un mundo y las situaciones pertenecen a esas dos personas y a nadie más. A partir de este entendimiento uno quizás comprende o juzga a esta pareja que permite que el espectador sea testigo de sus deseos, necesidades, amores, desamores, encuentros y desencuentros.

Escenas de  la vida conyugal es una excelente comedia dramática para disfrutar en el coqueto Teatro Maipo; es uno de los grandes éxitos de esta temporada; es una de las pocas obras que agotan todas las localidades de todas las funciones, y realmente se lo merecen.

Escenas de la vida conyugal
Teatro Maipo (Esmeralda 449)
Funciones: miércoles a domingos
Entradas: desde $120