Comenzó una nueva temporada para "LO NORMAL", obra de Malena Ratner y Francisco Ruiz Barlett, que luego de un exitoso paso por El Método Kairós, llegó al Teatro Picadero. La obra nos propone una historia simple, un matrimonio aprendiendo día a día a ser padres, una hija tímida que le gusta leer y una amiga extrovertida y cómplice que llenará de magia la monótona vida que la hija de la familia lleva.
Esta propuesta teatral es diferente a cualquier otra porque Camila (el personaje protagónico) tiene una discapacidad motriz, a partir de la cual "lo normal" se pone en tela de juicio, y se expone al público que el mundo no está preparado para la igualdad ante la necesidad básica de vivir en "normalidad". El texto plantea que existe un camino lleno de trabas para mucha gente, pero que todos tienen el mismo derecho de vivir con felicidad; también se abordan temas como los temores típicos de los padres, los cuales se potencian ante la discapacidad de un hijo; la curiosidad y despertar sexual en los jóvenes; y sobre todo se recalca el valor de la amistad y el poder vencer los propios miedos.
El elenco está integrado por Marisol Irigoyen, Maia Etchichury, Raquel Ameri, Diego Castro y José Giménez Zapiola (El Purre). Es tan magnifico y natural lo que estos cinco artistas hacen en escena, que emocionan y divierten a la vez, ya que si bien la obra es fuerte en su mensaje, te hace reír constantemente, lo que la transforma en una genialidad total.
Destacamos la música de Adrián Berra que, interpretada por El Purre, genera uno de los climas más lindos y conmovedores que vivimos en el teatro en lo que va del año.
La dirección de Malena Ratner y Fran Ruiz Barlett es impecable, todo fluye tan perfecto que es una obra sin fisuras de principio a fin.
En lo personal nos pasó que cuando terminamos de aplaudir en el saludo final, nos quedamos emocionados y pensando "qué lindo lo que acabamos de ver". Nos fuimos felices de la sala.
Lo Normal es una obra que llega al corazón, que abre la mente para escapar de los problemas triviales, que invita a valorar la vida y a empatizar con el otro. Es una obra tan simple como maravillosa que nadie debería dejar de ver. Las funciones son los lunes de septiembre y octubre en El Picadero (Pje. Discépolo 1857, CABA). No se la pierdan.
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